07 abril 2012

JUEVES SANTO

 
REFLEXIÓN JUEVES SANTO
 
El jueves Santo como sabemos es el día de la Eucaristía y el día del sacerdote. Esto nos invita a alegrarnos de estos dones tan extraordinarios que nos legó Jesús. 

Señor Jesús, he venido a visitarte:
Señor Jesús, he elegido este momento para venir a visitarte y estar unos minutos contigo. Estoy aquí para hacerte compañía, a Ti, que de mil maneras me has demostrado y me sigues demostrando día a día, que: eres mi Padre y siempre me estás esperando. Y Tu, al verme venir, como el padre del hijo pródigo, "Corres, te echas sobre mi cuello y me besas" (Lc.15:20) y quieres "Hacer fiesta y regocijarte porque...me había perdido y he regresado"(Lc.15:32). Ahora que estoy contigo y me estás recibiendo con los brazos abiertos, mueve mi corazón para valorar el amor que me tienes, amor que te lleva a olvidar mis fallas, haciéndome sentir que para Ti soy alguien muy especial, a quien amas infinitamente y recibes con gran alegría, a pesar de que con frecuencia encuentro excusas y pretextos para no corresponderte y justificar que no puedo venir a visitarte.
 "El que cree en mí, tiene vida eterna". (Jn.6:47). Creo en tus palabras: "Yo soy el pan de vida". (Jn.6:48) Creo en el milagro maravilloso que realizaste en la última cena, al tomar el pan diciendo: "Esto es mi cuerpo, que será entregado por ustedes" (Lc,22:19) . Creo que en cada Celebración Eucarística vuelves a obrar ese milagro en manos del sacerdote y te conviertes en "El pan que ha bajado del cielo" (Jn. 6:41), recordándome que "El que viene a mí, nunca tendrá hambre; y el que cree en mí, no tendrá sed jamás" (Jn.6:35). 

No hay comentarios:

Publicar un comentario